Dominio de la lengua bereber… De Sultan Mohamed III al heredero al trono Moulay Hassan: Un legado cultural continuo
Dominio de la lengua bereber… De Sultan Mohamed III al heredero al trono Moulay Hassan: Un legado cultural continuo

ALDAR/ Historia
La lengua bereber ha sido siempre una parte integral de la identidad y cultura de Marruecos, lo cual se refleja claramente en la historia del país, donde muchos gobernantes han destacado su profunda conexión con esta lengua.
En este contexto, destaca el sultán Mohamed Ben Abdullah Alaui, quien dominaba la lengua bereber y la hablaba con sus soldados y empleados bereberes, lo que refleja su gran respeto por la cultura bereber y su aprecio por su pueblo.
En un paso que sigue esta antigua tradición, recientemente se anunció que el heredero al trono, el príncipe Moulay Hassan, completó su aprendizaje de la lengua bereber durante su trayectoria académica, lo que demuestra de manera clara que Su Majestad el Rey Mohamed VI otorga una gran importancia a la preservación de este rico patrimonio cultural.
Esta orientación real refleja el compromiso del Rey Mohamed VI con la preservación y promoción de la identidad bereber en las instituciones marroquíes.
El interés por la lengua bereber data de la época del sultán Mohamed III, quien solía mostrar su dominio de esta lengua al comunicarse con miembros de tribus bereberes como los Ait Atta, según los testimonios históricos y culturales del historiador Ahmad Ben Khalid Al-Nasiri. También se recuerda que durante su reinado, el sultán Mohamed III demostraba un profundo respeto por esta lengua en su trato diario, comunicándose con los soldados bereberes en una lengua ancestral que expresaba su estrecha relación con ellos.
Hoy en día, la misión de revivir y desarrollar la lengua bereber continúa bajo la supervisión del Rey Mohamed VI, donde se enseña en escuelas, universidades y centros gubernamentales. Con el dominio de esta lengua por parte del heredero al trono, el príncipe Moulay Hassan, se materializa la continuación de la promoción de la lengua bereber como una parte esencial de la identidad de Marruecos, y se demuestra el compromiso de la familia real con la preservación de este antiguo legado cultural.